¿Cómo desarrollar resiliencia frente al COVID-19?

Aproximadamente un tercio de la población del planeta se encuentra en aislamiento como medida para prevenir el contagio del Covid-19 y es aquí en donde la resiliencia puede hacer un cambio mayor en tiempos de pandemia. 

Esto significa que casi toda la población mundial hizo una pausa drástica en sus vidas, actividades laborales, comerciales, recreativas y sociales para cumplir con las normas impuestas por las naciones para evitar los contagios.

¿Cómo afrontamos tantos cambios a la vez con la resiliencia?

En épocas de crisis y más aún como en la que vimos actualmente es esencial desarrollar resiliencia ante las diversas problemáticas económicas, sociales, políticas, emocionales y de salud con las que nos enfrentamos día a día. 

Al hablar de resiliencia me refiero a la capacidad que tiene un individuo para afrontar episodios, eventos traumáticos o difíciles, sin que ello signifique una transformación permanente en su estructura o su manera de ser. 

Ser resiliente no significa no sentir dolor, malestar o no encontrar dificultades ante las adversidades; la resiliencia parte de un punto de vista realista, de la confianza de que el golpe recibido no nos desestabiliza si hacemos frente a él, lo asumimos y lo utilizamos para mejorar nuestra vida.

Por lo tanto, ser resilientes nos va a ayudar a evitar determinados problemas psicológicos y que pueden derivar de una situación adversa, como la actual.  

Sin embargo, la resiliencia no es todo lo que necesitamos para adaptarnos, sino también, no podemos dejar a un lado el contexto socio-ambiental en el que habitamos, esto implica que se puede tener mayor o menor capacidad de afrontar problemáticas de acuerdo con el entretejido social y ambiental en que vivimos.

Un ejemplo de ello es el tan escuchado“¡quédate en casa!”, que por supuesto podría ser la mejor manera de controlar y disminuir los contagios.

Sin embargo, no todos tienen el privilegio socioeconómico para hacerlo, ya que actualmente más de 53 millones de personas en México vive en condiciones de pobreza.

Ser resilientes ante diversas situaciones

¿Cómo podría resultar la mejor vía quedarse en casa para aquellas personas que viven al día? Es una idea que bien podría salvarlos de contagios, pero se condenan a no generar ingresos para llevar un alimento a su casa. 

Tampoco podemos ignorar aquellas problemáticas que se generan dentro del hogar, el “Home Office” puede verse privilegiado, y lo es desde una perspectiva.

Sin embargo, olvidamos que el aislamiento social puede influir negativamente en nuestras vidas e incluso podemos estar pasando por un momento de estrés, a pesar de pertenecer a un grupo “privilegiado”.

En los dos ejemplos anteriores, podemos observar que en ambos existen problemáticas, todos tenemos diferentes dificultades que afrontar, pero todos tienen algo en común, RESILIENCIA. 

En el primer ejemplo, una persona que se encuentre identificado en tal situación, tendrá que aceptar los riesgos a los que está expuesto al momento de salir a trabajar y en medida de sus propias posibilidades.

Además, deberá cuidarse para evitar los contagios, procurando las interacciones que tiene día a día, tener mayor higiene y disponer de los recursos necesarios (tapabocas, careta, guantes, gel antibacterial).  

En cuanto a la segunda persona, probablemente tendrá que adaptarse a un nuevo estilo de vida en convivencia 24/7 con su familia, pareja, roomies, o incluso viviendo solo tendrán la responsabilidad de afrontar las problemáticas que puedan avecinarse, adaptarse a una nueva modalidad de trabajo, aceptar tener menos privacidad en el hogar, aburrimiento, hiperconectividad, entre otras. 

Esta crisis, no sólo nos ha traído problemáticas que afrontar, sino también estamos atravesando una transición digital, económica y social.

De un momento a otro, cambió la forma en cómo nos relacionamos, aprendemos, consultamos al médico o nos entretenemos, sino también como compramos, viajamos, trabajamos, etcétera.

¿Qué hacemos con tantos cambios de golpe SIN resiliencia? 

Difícilmente podremos adaptarnos a las adversidades que NO están dentro de nuestro control, como lo es una pandemia.

Sin embargo, es nuestra responsabilidad aprender nuevas habilidades para seguir adelante construyendo un nuevo modo de vida equilibrado. 

Es momento de saber aprovechar el tiempo para aprender a hacer las cosas de una manera diferente, como ciudadanos, trabajadores, emprendedores, y en definitiva como sociedad. 

10 pautas que te ayudarán a mantenerte en un estado de resiliencia:

    1. Reconoce tus emociones y no huyas de ellas. Tómate el tiempo que necesites para descansar, platicar, escribir, sentirte mejor, y solucionar aquellas problemáticas que te abruman día a día. 
    1. Acepta las circunstancias que estás viviendo y que no puedes cambiar. Y comienza a trabajar en los aspectos que están dentro de tu control y pueden ser modificables. 
    1. Si ya tenías una larga lista de metas que hacer este año y la contingencia te las estropeó. ¡Haz otra lista con objetivos! Es importante que estas metas sean realistas y estés comprometido/a con cada una de ellas. 
    1. Mantén contacto con tus familiares, amigos, conocidos. Que la distancia no te limite a convivir y ver de manera virtual a tus seres queridos.
    1. Ejercítate, cuando hacemos actividad física aumentamos la autodisciplina, el autoconocimiento y la autoestima. 
    1. Utiliza cada experiencia o problemática que vivas para crecer como persona. 
    1. Piensa en un propósito que dé sentido a tu vida; esto te ayudará a enfrentar mejor los desafíos cotidianos. 
    1. Busca ayuda psicológica, te ayudará a comprender, aceptar y afrontar las diversas situaciones que te abruman día a día. 
    1. Desconéctate de todos los dispositivos, crea un ambiente relajante, fresco y tranquilo para dormir lo suficiente y descansar adecuadamente. 
    1. Dosifica las noticias, los medios de comunicación están abarrotados de información las 24 horas, lo cual es un estímulo comunicativo de tensión constante que puede agravar el estrés emocional. Es necesario mantenerse informado, pero también regular la cantidad de tiempo que se pasa escuchando las noticias.

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Mafer Ramos
Mafer Ramos

Especialista en redacción de contenidos para blog optimizados con técnicas de posicionamiento seo para motores de búsqueda. Directora de Gleo. Comúnicóloga y Mercadóloga. Mamá de Luna y Marina.

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